7 Mitos Y Verdades Sobre Repelentes Contra Insectos
La verdad sobre el ingrediente activo de algunos repelentes contra insectos.
¿Qué es el DEET? Suena bastante misterioso, pero no lo es en absoluto. DEET es simplemente el nombre común para N,N-dietil-m-toluamida. Se ha utilizado como repelente contra insectos altamente eficaz desde que lo desarrolló el ejercito de los Estados Unidos en 1946.
Mito: El DEET mata los zancudos.
Verdad: El DEET no mata a los zancudos, los disuade y los repele.
El DEET interfiere en las neuronas y receptores situados en las antenas de los zancudos y partes de la boca que detectan las sustancias químicas como el ácido láctico y el dióxido de carbono.
Mito: Los niños no deben usar productos que contengan DEET.
Verdad: Aplicado correctamente, el DEET es apto para el uso en niños.
Los productos que contienen DEET pueden utilizarse en niños. Lea siempre las instrucciones de la etiqueta del producto y, cuando lo utilice en niños, rocíelo primero en la palma de la mano y, a continuación, aplíqueselo a la piel.
Mito: El olor del DEET es lo que repele a los zancudos
Verdad: El DEET impide que los zancudos se posen en el cuerpo y le piquen.
Existen varias teorías sobre cómo funciona el DEET para repeler los zancudos, y la ciencia continúa evolucionando sobre su modo de acción específico. Cuando se aplica correctamente, el DEET forma una barrera de vapor en la superficie de la piel que impide que los zancudos se posen en ella.
Mito: El DEET es una sustancia química sintética relativamente nueva.
Verdad: El DEET fue desarrollado por el ejército estadounidense en 1946.
El DEET fue desarrollado por primera vez por el ejército estadounidense en 1946 para el uso del personal militar en zonas infestadas de insectos.
Mito: El DEET es lo mismo que DDT.
Verdad: ¡No! DEET no es DDT.
DEET no es DDT.
Mito: Cuanto mayor es el porcentaje de DEET, mejor protegido está.
Verdad: El nivel de DEET en el repelente solo determina cuánto dura la protección.